En una reunión extraordinaria celebrada en San Vicente del Caguán, Caquetá, las delegaciones del Gobierno Nacional y de las disidencias del Estado Mayor Central de las Farc acordaron seguir adelante con el proceso de negociaciones de paz, pese a las dificultades enfrentadas recientemente.

Según lo confirmado por ambas partes, se tomaron decisiones para fortalecer el Mecanismo de Veeduría, Monitoreo y Verificación Nacional, así como los mecanismos regionales y locales ya instalados. Además, se elaboraron planes para implementar “acuerdos especiales de transformación territorial” en zonas como Caquetá, Guaviare, Meta, Putumayo, Norte de Santander, Sur de Bolívar y Norte de Antioquia.

“Se acordó continuar con los diálogos y reiterar los compromisos construidos desde la instalación de la mesa el 16 de octubre de 2023, y en las conversaciones anteriores”, indicó la carta con los acuerdos alcanzados.

Para avanzar en estos acuerdos territoriales, se priorizaron reuniones los próximos 8 y 9 de abril con delegados de ministerios y autoridades departamentales. Asimismo, se fijó que en el ciclo 5 de negociaciones, previsto para finales de mayo de 2024, “se evaluarán los avances en implementación de los acuerdos parciales, el tratamiento a las situaciones críticas del proceso y a iniciativas de interrelación con todos los aspectos de la Paz Total”.

Esta decisión de continuar las conversaciones se da pese a que previo a la reunión, las disidencias anunciaron la creación del Bloque Central con presencia en tres departamentos, y se registraron ataques atribuidos a este grupo ilegal en Cali y Tumaco durante la noche del 4 de abril.