Frente a la presunta negligencia institucional, miembros de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó extrajeron a pie y en hamacas los cuerpos sin vida de una mujer de 26 años y un menor de 14 años, asesinados en una finca de la vereda La Esperanza.

A pesar de las intensas lluvias en la zona, una comisión humanitaria de la Comunidad caminó durante más de seis horas para trasladar los cadáveres hasta el caserío de la población, debido al alto grado de descomposición que presentaban y ante la solicitud de familiares y amigos de las víctimas.

“Se decide hacer el levantamiento de parte de la comunidad, pues ya no podíamos aguantar más, los cuerpos ya se iban descomponiendo y la familia también y la misma comunidad también requería que se levantaran ligero para hacer todos los trámites”, declaró un integrante de la Comunidad de Paz.

Previamente, el comandante de la Policía en Urabá, el coronel William Zubieta, había indicado que estaban a la espera de que la Comunidad autorizara su ingreso a la zona, debido a los protocolos y acuerdos especiales que esta tiene por su protección jurídica internacional.

Después del arduo trayecto, los cuerpos de las víctimas del doble homicidio quedaron en manos del CTI de la Fiscalía, y se espera que en las próximas horas sean entregados a sus familiares para llevar a cabo sus honras fúnebres.