El presidente Joe Biden ha emprendido una gira de campaña de tres días por estados clave del oeste de Estados Unidos, con el objetivo principal de cortejar el voto hispano y reforzar su apoyo al movimiento sindical y los derechos sobre el aborto.

La gira, que incluye paradas en Nevada, Arizona y Texas, representa un esfuerzo estratégico para impulsar el respaldo del creciente electorado hispano, un grupo demográfico crucial para su victoria en las elecciones presidenciales de 2020.

Durante su visita a Reno, Nevada, Biden se dirigió a sus simpatizantes, contrastando sus valores con los de su predecesor republicano, Donald Trump, y enfatizando su compromiso de abordar problemas que afectan a los estadounidenses, como la asequibilidad de la vivienda y la creación de empleos.

Nevada y el área del condado de Washoe serán campos de batalla críticos en las próximas elecciones de noviembre, afirmó Biden, resaltando la importancia de este estado para sus aspiraciones de reelección.

En Las Vegas, el mandatario promocionó las políticas de vivienda de su administración, incluyendo propuestas para reducir costos tanto para propietarios como inquilinos. Asimismo, instó a la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios a cumplir con un acuerdo reciente que permite a compradores y vendedores negociar comisiones más bajas.

La gira también ha servido para que Biden critique abiertamente a su rival político, el expresidente Trump, por su manejo de diversos temas, incluidos los asuntos de los veteranos y las pérdidas de empleo durante su presidencia.