Investigan la muerte de un puma en Villa Caro, Norte de Santander
Por: Maria José Salcedo
7 marzo, 2024
La Autoridad Ambiental de Norte de Santander, Corponor, ha iniciado una investigación tras el lamentable asesinato de un puma en la zona rural del municipio de Villa Caro. Este acto atroz, presuntamente perpetrado por pobladores locales, ha generado conmoción y preocupación en la comunidad y las autoridades ambientales.
El puma, una de las especies más emblemáticas de la región y fundamental para el equilibrio ecológico de los ecosistemas, fue víctima de esta violencia injustificada. Imágenes desgarradoras adjuntas al comunicado de prensa revelan la gravedad de la situación y la urgencia de tomar medidas para proteger la fauna silvestre.
La oficina de Control y Vigilancia y la Subdirección de Recursos Naturales de Corponor, en coordinación con la Policía Ambiental, la Inspección de Policía local y la Fiscalía, están trabajando arduamente para esclarecer este crimen y llevar ante la justicia a los responsables.
El director de Corponor, Rafael Humberto Camacho, ha condenado enérgicamente este acto y ha hecho un llamado a la comunidad para que cualquier conflicto con especies de felinos sea reportado de inmediato a la Corporación. La preservación de la vida silvestre es una responsabilidad compartida que requiere el compromiso de todos.
En este sentido, la Corporación ha habilitado la línea telefónica 3006850976 para recibir reportes y brindar el acompañamiento oportuno en casos de conflicto con la fauna silvestre. Se recuerda a la comunidad que el respeto y cuidado hacia las especies silvestres son fundamentales para garantizar la sostenibilidad de nuestros ecosistemas.
Estos felinos, al igual que los jaguares o los ocelotes, hacen parte de los mayores depredadores del continente. Su presencia es fundamental en ecosistemas andinos, pues son reguladores de población de muchas especies, como los roedores.
Sin embargo, por la pérdida de bosques y la expansión de la agricultura, estos animales se han quedado sin hábitat en muchas partes, y suelen entrar en contacto con las personas por la cercanía que generan sus actividades.
Ese contacto es conflictivo cuando, por ejemplo, al no tener presas suficientes en un bosque deteriorado, los pumas salen a cazar animales de granja, como las vacas o los chivos.
“En Norte de Santander se ha presentado conflicto entre seres humanos y pumas debido a que al ser un depredador tope y por la pérdida de biodiversidad dada en muchos municipios del departamento, estos han llegado a atacar animales domésticos como ganado ovino y caprino, aunque prefieren especies silvestres como venados, armadillos, coatis y otros”, explicó la subdirectora de Recursos Naturales de Corponor, Sandra Milena Gómez Peñaranda, en el comunicado.
La Corporación hizo un llamado a los habitantes de la región a reportar los conflictos que se presenten con los animales con el fin de intentar solucionarlos antes de que se presenten casos como el de este puma que habría muerto a manos de los habitantes de la vereda.