Atlético Nacional vivió una noche desastrosa en el Estadio Atanasio Girardot, en la segunda fase de la Copa Conmebol Libertadores. El equipo colombiano, sumido en una crisis deportiva, no logró respetar su casa y cayó derrotado de manera humillante,  perdiendo por goleada 0-3 ante Nacional de Paraguay y quedando eliminado de la Libertadores.

El equipo colombiano, jugando como local, enfrentó su primera derrota en casa ante un equipo paraguayo, sellando su eliminación con un marcador global de 4-0 tras la derrota 1-0 en la ida en Los Defensores del Chaco.

Los problemas defensivos y la falta de ideas en el frente de ataque fueron evidentes en el desempeño de Atlético Nacional durante el partido. El guardameta Santiago Rojas, quien curiosamente pertenece al club paraguayo, quedó comprometido en los goles que sellaron la derrota de Atlético Nacional.

El primer tanto (24) llegó tras un tiro libre ejecutado por Alfaro, producto de una falta evitable de Édier Ocampo. El segundo gol (72), decisivo para la sentencia del partido, surgió de un error garrafal de Rojas en la gestión de un córner, permitiendo que Rodrigo Arévalo aprovechara la confusión en el área y anotara. En los minutos finales (90+2), un penal convertido por Facundo Velazco selló la victoria paraguaya.

El desacierto del guardameta generó un mar de dudas en la defensa de Nacional, incapaz de despejar la pelota y cerrar la anotación de Arévalo. La confusión y el desconcierto reinaron en el área verde, culminando en una noche catastrófica para Atlético Nacional.

La humillante derrota añade presión al ambiente ya tenso en el club, especialmente ante la llegada de Pablo Repetto, quien asumirá las riendas en busca de superar la crisis deportiva que atraviesa el equipo. La derrota resonará en el Atanasio Girardot mientras Atlético Nacional busca reponerse y encontrar soluciones para revertir la situación en la competición internacional.