El desplazamiento forzado y el confinamiento en Colombia se redujeron durante 2023, pero aumentaron la extorsión y el reclutamiento de menores, según el informe anual de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (OCHA) denominado “Tendencias e Impacto Humanitario en Colombia 2023”, el cual fue revelado este martes.

Según el informe, durante el año 2023, se registraron 63,249 desplazamientos masivos y 100,005 desplazamientos individuales, con 88,007 personas confinadas forzosamente, afectando a 250,000 personas en 204 emergencias humanitarias. A pesar de la elevada cifra, OCHA destaca una disminución del 14% en personas confinadas en comparación con 2022 y una reducción del 23% en desplazamientos masivos.

Las comunidades más afectadas continúan siendo las rurales, indígenas y afrodescendientes en áreas como la región Pacífico, el corredor Noroccidental, la Frontera con Venezuela y la Amazonía. Sin embargo, el informe advierte sobre un aumento significativo de víctimas en el segundo semestre del año, especialmente en julio y noviembre, impulsado por el interés de Grupos Armados No Estatales (GANE) en controlar corredores de movilidad y obtener beneficios de economías ilegales en zonas estratégicas.

Otra cifra que también disminuyó es el uso de minas antipersonales  (MAP) durante 2023 que se redujo en un 32%, con 95 víctimas registradas, 44 menos que el año anterior, aunque se presentaron un total de 929 incidentes relacionados -por activaciones- durante el año.

La extorsión repuntó, pero el reclutamiento forzado se disparó

En contraste, la tendencia de extorsión no solo persiste, sino que repuntó, con 10,263 casos reportados en 2023, frente a los 9,791 casos reportados en 2022. Los departamentos más afectados fueron Cundinamarca, Antioquia, Atlántico, Valle del Cauca y Norte de Santander. OCHA atribuye esta práctica a grupos armados ilegales que buscan financiarse.

No obstante, la cifra más preocupante es el notable aumento del 93% en el reclutamiento forzado y utilización de niños, niñas y adolescentes, con 251 casos registrados en 2023 en comparación con los 130 en 2022. Este aumento -advierte OCHA- plantea inquietudes sobre la vulneración de los derechos de los menores y su papel como causa principal de desplazamientos.

Como aspecto positivo, el informe destaca el impacto de los acuerdos de cese al fuego bilateral en la reducción del 33% de la violencia y enfrentamientos entre la Fuerza Pública y grupos armados ilegales en comparación con 2022. Sin embargo, los enfrentamientos entre los propios grupos criminales mantuvieron una tendencia elevada, siendo la expansión territorial de estos grupos la principal causa del 43% de los desplazamientos masivos y del 34% de los confinamientos ocurridos en 2023.

De cara a 2024, OCHA alerta que la situación humanitaria sigue siendo crítica ante la expansión de grupos armados ilegales en nuevas regiones del país que mantiene la emergencia en las comunidades, amenazando con “combates continuos, enfrentamientos en sus territorios, amenazas, homicidios, desplazamientos y confinamientos”.

La situación sigue siendo desafiante, por lo que OCHA hace un llamado a proteger a las comunidades afectadas, buscando la cooperación nacional e internacional para abordar los múltiples aspectos del conflicto armado colombiano.