En la mañana del 7 de febrero, se hizo viral un video del locutor Francisco ‘Paco’ Ramírez, de Tropicana Cali, quien insultó a una compañera por presentar una noticia positiva sobre el Gobierno nacional y lanzó comentarios ofensivos contra el presidente colombiano Gustavo Petro, llamándolo “bandido” y “narcotraficante”. El mandatario respondió en redes sociales acusando al locutor de calumniar y destruir su imagen como presidente.

Ante la repercusión, la empresa Caracol S.A., dueña de Tropicana Cali, emitió un comunicado condenando el comportamiento de Ramírez y anunciando medidas. Posteriormente, confirmaron el despido del locutor. En el comunicado, se destaca el rechazo a cualquier maltrato o acción violenta, especialmente hacia mujeres, y se menciona que la actividad periodística se desarrolla con total respeto a la libertad de expresión.

Ramírez, en declaraciones a Semana, confirmó su despido y mencionó que la controversia comenzó cuando bostezó al aire durante la presentación de noticias positivas sobre Petro,  lo cual la compañera interpretó como burla y que la situación se amplificó en redes sociales. Aunque afirmó no tener problemas con ella, señaló que fue tildado de misógino y otras acusaciones.

Polémica en Tropicana Cali por insultos a compañera y señalamientos contra Petro

“Cuando estaba dando la información a mí me dio por bostezar al aire, entonces ella lo tomó como que me estoy burlando, y yo le dije que por qué era tan delicada, que siguiera con sus cosas de Petro, y eso fue el punto de referencia para todo, porque este país basta con que veinte hagan incendio para encenderlo todo. Entonces comenzaron a llamarme misógino y otras cosas”, afirmó Ramírez.

En el video que se viralizó del programa “Cómo amaneció Cali”, Ramírez insultó al presidente colombiano Gustavo Petro y llamó “boba” a su compañera Estefanía Lerma. Ramírez explicó que sus comentarios sobre Petro se referían a una entrevista de alias Popeye en la que expresaba fuertes críticas contra el presidente. “Si miran todo el contexto, se darán cuenta: la parte de Popeye no aparece en el video que circula en redes sociales”, afirmó.

El locutor afirmó que no es simpatizante de Petro, pero que no se arrepiente de sus comentarios. “Yo no he visto que despidan a un locutor porque le dijo ‘Porky’ a Duque o le dijo asesino en alguna empresa a Uribe. Fue un comentario de grupo y los incendiarios tomaron eso como el boom, y gracias a eso hoy no estoy en Caracol”, afirmó.

Así mismo, reiteró que no atacó a Lerma, con quien tiene una buena relación, y que la acusación de misoginia es exagerada.

“Cuando uno se arrepiente de algo es cuando comete un error puntual, y yo no he cometido un error. Si yo me arrepiento, es dar a entender que yo ataqué a una muchacha que he apoyado, que ella sabe cuánto la quiero y cuánto he hecho por ella”, aseguró.

Además afirmó que su personaje de la Tía Inés es apasionado y defiende opiniones puntuales de vida, y a través de él ha trabajado por la comunidad: “Si yo hago una cuenta, son más de 80 mil personas que pueden dar una referencia positiva de la Tía Inés. Acabo de regalar, con la ayuda de Dios, más de seis mil regalos de primer nivel”, subrayó.

Respecto a su despido, indicó que se enteró al mediodía y que comprende la decisión de la empresa. Criticó a quienes lo atacaron en redes sociales y expresó su tranquilidad al dejar Caracol, destacando que tenía aproximadamente ocho años vinculado con Tropicana.

“No estoy dolido con una empresa como Caracol y menos con un equipo de trabajo como Tropicana, que somos una familia. Lo que me duele es el punto de partida del país, las hienas de las redes sociales, que buscan cualquier escenario para sacar lo incompetente y frustrados que son, porque ninguno de los que me ha criticado ha hecho ni la cuarta parta de lo que he hecho por la ciudad. Me voy tranquilo, aunque tengo que cuidarme porque un bobo toreado mata a la mamá y quema la casa”, aseveró.