La Fiscalía General de la Nación imputó al exgobernador de Vichada, Blas Ortíz Rebolledo, por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y tráfico de influencias de servidor público.

Según la investigación de un fiscal de la Corte Suprema de Justicia, Ortíz Rebolledo habría direccionado en 2008 dos contratos por más de 400 millones de pesos para beneficiar a un hombre que presuntamente articuló acciones fraudulentas que le permitieron ganar las elecciones.

Los contratos eran para ampliar la sede de la Gobernación en Puerto Carreño -por valor superior a 183 millones de pesos- y para adecuar una casa fiscal -contrato de 236 millones de pesos-. Los pliegos habrían sido anticipados al cuñado del articulador del fraude para que ajustara sus ofertas y se quedara con ellos.

Además, Ortíz Rebolledo habría influido para nombrar a la hermana de esta persona como subdirectora de un hospital público, el ESE Hospital San Juan de Dios de Puerto Carreño.

La elección del exgobernador en 2008 fue anulada al año siguiente por fraude electoral. La Fiscalía lo señala ahora de beneficiar a quien habría orquestado esas irregularidades.