Minieducación prohíbe los ‘útiles inútiles’ en las listas escolares ¿Cuáles son?
Por: Maria José Salcedo
11 enero, 2024
En un esfuerzo por aliviar la carga económica que enfrentan los padres debido a los elevados costos de los útiles escolares, el Ministerio de Educación Nacional de Colombia ha emitido la Resolución 17821 de 2023, marcando un hito al prohibir la inclusión de “útiles inútiles” en las listas escolares de colegios privados.
La medida, que responde a las numerosas quejas de los padres sobre gastos innecesarios, establece restricciones claras para evitar que las instituciones educativas soliciten productos específicos o limiten la elección de proveedores. Este enfoque tiene como objetivo reducir la presión financiera sobre las familias, al tiempo que garantiza una educación de calidad para los estudiantes.
La resolución enfatiza la prohibición de incluir artículos de aseo personal o limpieza en las listas de útiles, argumentando que estos costos deben estar incorporados en la matrícula y no representar una carga adicional para los padres.
Pero ¿Cuáles son esos artículos prohibidos?
Los colegios no pueden exigir a los padres de familia comprar libros o cuadernos de marcas específicas ni limitar la participación de proveedores. En este sentido, la resolución contempla que “los colegios privados no podrán incurrir en prácticas restrictivas al momento de solicitar materiales educativos, obligando la adquisición de útiles, textos o uniformes de marcas específicas”, consigna en la Resolución MinEducación.
Las toallas, rollos de papel higiénico, toallas, toallitas desinfectantes y dotación para el botiquín escolar no deben ser incluidos en la lista de útiles.
Asimismo, se limita la solicitud de uniformes a dos tipos: uno de uso diario y otro destinado a educación física, sin permitir indicaciones específicas sobre dónde adquirirlos.
Esta iniciativa tiene como objetivo principal asegurar que las listas escolares se centren en elementos esenciales para el proceso educativo, evitando así que los padres se vean obligados a comprar artículos costosos y prescindibles. Se espera que esta medida no solo alivie las finanzas familiares, sino que también promueva la transparencia y la equidad en la adquisición de materiales escolares.