Los desafíos económicos de Colombia para el año 2024 se presentan como un escenario mixto, marcado por factores positivos y negativos que configuran un panorama de incertidumbre. El peso colombiano fortalecido frente al dólar, la disminución de la inflación y el desempleo son aspectos alentadores del 2023. Sin embargo, la persistente caída en la productividad, tasas de interés que, aunque descendieron en diciembre, mantienen preocupaciones, y un desbalance comercial significativo, desafían la estabilidad financiera del país.*

Según Sebastián Chacón Marín, director de la Escuela de Negocios y Desarrollo Internacional del Politécnico Grancolombiano, cinco grandes retos se perfilan como protagonistas en la agenda económica y financiera para el próximo año.*

Crecimiento Económico:

El principal desafío radica en revertir la baja tasa de crecimiento, estimada en un 2% al cierre de 2023. Chacón destaca la necesidad de impulsar el crecimiento desde el sector privado, enfocándose en la confianza al sector productivo, respaldada por reformas en curso en el Congreso, que abarcan aspectos laborales, de salud y pensiones. Políticas para estimular la compra de viviendas se plantean como una vía para impulsar el desarrollo del sector de la construcción, y se resalta la atención a las ventajas competitivas en el turismo.

Desde la esfera pública, la ejecución de planes de inversión, especialmente con el presupuesto proyectado para 2024, el más alto en la historia del país tras la reciente reforma tributaria, toma un papel crucial. Avances en proyectos significativos como la primera línea del Metro de Bogotá y la ampliación del Metro de Medellín son claves para dinamizar la economía.*

Inflación:

La inflación, una preocupación global, presenta desafíos específicos para Colombia. Factores como el fenómeno de El Niño podrían intensificarla, generando alzas en los precios de alimentos y en el costo de la gasolina. Esto afectaría el poder adquisitivo y el bienestar de la población.

Empleo:

La generación de empleo de calidad es esencial para combatir la creciente informalidad. Con tasas del 85% en zonas rurales y más del 55% en áreas urbanas, se destaca la importancia de impulsar políticas públicas que creen oportunidades laborales para grupos vulnerables, especialmente jóvenes y mujeres.

Inversión Extranjera:

Construir confianza entre los inversionistas es clave, según Chacón. Las reformas promovidas por el Gobierno deben reflejar un proceso de concertación que considere eficazmente los diversos puntos de vista, decisiones y perspectivas, tanto de sectores opositores como del sector empresarial. Esto fomentaría la confianza necesaria para atraer inversión extranjera, desencadenando un círculo virtuoso de crecimiento y empleo.

Exportaciones:

La búsqueda de nuevos mercados, especialmente en economías emergentes como China, India, Brasil, Rusia, Medio Oriente y África, es crucial. La consolidación de acuerdos comerciales y una política de industrialización son pilares para impulsar las exportaciones y agregar valor a los productos.

En palabras de Chacón, el 2024 demanda enfrentar estos retos con determinación y visión estratégica. El compromiso de actores clave, tanto públicos como privados, será crucial para superar las adversidades y avanzar hacia un horizonte económico más próspero.

María Claudia Lacouture, presidenta de la Cámara Colombo Americana (AmCham Colombia), añade que en un contexto de menores dinámicas de crecimiento, es necesario un trabajo público-privado para aprovechar la internacionalización, destacando las oportunidades de exportación que ofrecen países como Estados Unidos, con el cual se mantiene un TLC vigente.

El 2024 se presenta como un año lleno de desafíos, pero también de oportunidades para el crecimiento y desarrollo sostenible de la economía colombiana.*

Con información de Portafolio.co