¡Llegó el agua! Proyecto piloto lleva agua potable a Yotojorotshi, La Guajira

Por: Elizabeth Montoya

9 diciembre, 2023

 

La esperanza llegó junto con el agua potable a Yotojorotshi, una ranchería ubicada en La Guajira, tras la instalación de una planta de ósmosis inversa con capacidad de surtir con hasta 10.000 litros diarios no solo a las 230 personas de este sector, sino alrededor de 1000 habitantes de cuatro comunidades indígenas ubicadas en la zona, que carecían de este servicio básico.

El proyecto surgió hace seis meses con una campaña crowdfunding que inició la organización La Tienda de la Empatía, a través de Vaki, denominada “#YotojorotshiEnMiCorazón a raíz de un lamentable incidente: Gabriel José González, un niño de la comunidad de tan solo un año de vida, murió por desnutrición crónica y la falta de acceso al agua potable.

A esta iniciativa se sumaron numerosas empresas y particulares, entre ellos, la empresa Aire Energía y W Radio, cuyos aportes permitieron la construcción de un innovador sistema que dará tratamiento al agua extraída a 250 metros de profundidad para volverla apta para el consumo humano, lo que cambiará la realidad de la comunidad, que hasta ahora bebía del reservorio de un jagüey donde se recolectaba agua de lluvia, la cual no contaba con las respectivas medidas sanitarias para su consumo.

Además, el proyecto no solamente contempló la instalación de las nuevas plantas de extracción y purificación del agua subterránea, sino que le duplicó la capacidad al jagüey  y le instalaron un cerramiento especial, para que los animales no puedan entrar a contaminarlo, y que, en temporadas más secas y calurosas, cuando no haya lluvia, no se evapore tan rápido y se pueda seguir teniendo agua. No obstante, esta agua no se destinará al consumo humano, sino a labores domésticas.

“Es impresionante todo lo logrado. Ahora ese jagüey sólo se usará para recolectar agua de lluvia, no para consumo. La planta nueva purificará el agua del subsuelo”, manifestó Martha González, de La Tienda de la Empatía.

La planta promueve el uso de energías renovables, pues trabajará con un sistema de energía fotovoltaica que garantiza el funcionamiento de la planta a pesar de no contar con el suministro eléctrico tradicional.

Además, el proyecto llevará los nombres en un mural de las 1500 personas y entidades que han contribuido al proyecto, buscando que esta iniciativa se replique en otras comunidades y así evitar que más niños mueran por causas prevenibles relacionadas con el agua, como le sucedió al pequeño Gabriel José González.