La Fiscalía Seccional de Valledupar ha anunciado avances significativos en la investigación del millonario robo perpetrado en la residencia del reconocido cantante vallenato Silvestre Dangond Corrales, ubicada en el barrio Villalba. Tras varios días de indagación, las autoridades judiciales han logrado la captura de Luz Enith Orozco Troya, empleada de servicios generales, quien presuntamente facilitó el acceso de los delincuentes a la vivienda del artista sin autorización, imponiéndole una medida de aseguramiento en centro de reclusión.

La fiscal a cargo del caso, Tatiana Munevar, detalló que Orozco Troya permitió a personas desconocidas ingresar a la propiedad para “ultimar detalles” relacionados con el robo. Según declaraciones del fiscal ante el juez, “Ingresan unas personas y hacen un recorrido, no es un recorrido de ver los objetos que llaman la atención de esa residencia, sino hacer una inspección, de lo que se presume que se está haciendo. No se detienen a ver un cuadro puntual, o una decoración del señor Silvestre. Suben al segundo piso, ¿para qué?”.

La investigación reveló que la empleada, en complicidad con los delincuentes, habría sustraído un paquete con cerca de $220 millones y otros objetos de valor el 14 de noviembre. Las cámaras de seguridad dentro de la vivienda fueron fundamentales para evidenciar este acto, y al allanar la casa, las autoridades recuperaron parte de los objetos sustraídos.

El 18 de noviembre, cuatro días después, dos hombres ingresaron nuevamente a la residencia, esta vez rompiendo una ventana en la parte trasera. En un tiempo récord de siete minutos, se dirigieron a la habitación principal, donde sustrajeron la asombrosa suma de $890 millones en efectivo. La Fiscalía sostiene que los delincuentes tenían conocimiento detallado de la ubicación precisa del dinero, sugiriendo la posible implicación de una tercera persona.

Las autoridades, tras revisar las imágenes de seguridad, determinaron que Luz Enith Orozco Troya era presuntamente responsable del delito de hurto agravado debido a la confianza que le tenían sus empleadores. La captura de Orozco Troya se llevó a cabo el miércoles 22 de noviembre en el sector del barrio Villalba, gracias a una orden judicial.

Aunque la mujer no aceptó los cargos durante la audiencia este martes 5 de diciembre, luego de evaluar la evidencia presentada, el juez determinó que representa un peligro para la sociedad y decidió privarla de la libertad en un establecimiento carcelario en calidad de indiciada.