Tras la denuncia viral en redes sociales del presunto abuso de autoridad por parte de un policía contra la periodista Naylea Barros en Santa Marta, el director de Fiscalías del Magdalena confirmó que el uniformado, de nombre Rubén Carmona Escorcia -según denunció en sus redes la comunicadora- fue apartado de sus funciones y se inició un proceso disciplinario en su contra.

Según el relato de la comunicadora, el policía metropolitano la agredió física y verbalmente cuando documentaba con su celular las protestas de un grupo político en la ciudad. Le reclamó de forma agresiva por la grabación para luego arrebatarle el teléfono y propinar golpes.

Tras reprochar este ataque contra la mujer y la vulneración de sus derechos, la fiscalía se abstuvo de dar más declaraciones hasta no avanzar en la investigación disciplinaria contra el uniformado por su reprochable proceder mientras ejercía sus funciones.

Así fue la agresión contra la comunicadora:

https://twitter.com/NayBarros08/status/1728426379572633839

https://twitter.com/NayBarros08/status/1728185033901453796

Opicol se solidariza con la periodista

La Organización de Periodistas Independientes de Colombia (Opicol) rechazó de forma enérgica la agresión y violencia ejercida por un policía contra la comunicadora Naylea Barros mientras cubría unas protestas en Santa Marta.

Opicol recordó el derecho que tienen los periodistas de movilizarse libremente para informar, consagrado en las leyes colombianas, así como la obligación de las autoridades de garantizar su labor.

“No podemos tolerar que un miembro de la policía, cuyas funciones son otras, agreda a una mujer y vulnere sus derechos, máxime cuando hoy 25 de noviembre conmemoramos el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer”, manifestó la organización gremial.