El papa Francisco mostró buen estado de salud tras haber cancelado un discurso previsto para este domingo en horas de la mañana por un leve resfriado, despejando así los rumores sobre su condición física a sus 86 años.

El Pontífice prefirió no leer su alocución preparada ante la Conferencia de Rabinos Europeos para “ganar tiempo y saludarles individualmente”, explicó el Vaticano

Inicialmente Francisco luchó para respirar al recibir a los rabinos, lo que generó preocupación. Sin embargo, horas después encabezó animadamente un encuentro con 7 mil niños que se llevó a cabo en la Santa Sede.

El Papa conversó espontáneamente con los menores, bromeó con ellos y no evidenció síntomas de su malestar anterior. Además, respondió preguntas sobre temas como la paz y el medioambiente.

“Lamento haber tenido que cancelar mi discurso esta mañana. Pero como ven, ya me he recuperado para pasar esta hermosa tarde con todos ustedes”, dijo Francisco sonriente.

Esta era la primera actividad pública del Papa tras someterse a una cirugía de colon en julio. Desde entonces ha realizado varios viajes internacionales mostrando buena salud.

“Francisco sigue muy activo a sus 86 años. Un simple resfrío no es motivo de alarma”, afirmó su vocero, Matteo Bruni.

El Vaticano aseguró que el Papa mantiene su agenda y viajará a Dubái el próximo mes para participar en la Cumbre Climática de la ONU.