Las autoridades investigan la exhumación no autorizada del cuerpo del narco ecuatoriano Junior Alexánder Roldán Paredes, ocurrida en el cementerio de Envigado, en el Valle de Aburrá.

Según informó la Policía Metropolitana, un trabajador del camposanto encontró una de las puertas abiertas y al ingresar notó que faltaba el cadáver de Roldán Paredes, que había sido sepultado en mayo pasado.

El narcotraficante, cabecilla del grupo delictivo Los Águilas con presencia en Guayaquil, fue asesinado de un tiro en la cabeza en el municipio de Fredonia el 6 de mayo. Su cuerpo fue abandonado en descomposición a un costado de la vía.

Tras confirmar su identidad a través de exámenes necrodactilares y otros rasgos físicos como tatuajes, los restos de Roldán fueron enterrados en el cementerio envigadeño el 18 de mayo.

El ecuatoriano había salido de la cárcel en febrero de este año y en marzo fue declarado prófugo por no cumplir con el grillete electrónico. Se cree que lo mató su escolta para robarle dinero cuando escapaba.

Aún se desconoce quiénes sustrajeron el cadáver del peligroso capo criminal. Las autoridades indagan el móvil y los responsables del macabro hurto en el camposanto.