La Sección Primera del Consejo de Estado suspendió provisionalmente el título de maestría de la excongresista Jennifer Arias. La decisión se tomó en medio del proceso que inició la misma Universidad Externado de Colombia, que ya confirmó que la exrepresentante a la Cámara plagió su tesis de maestría.

¿Cuál título?

Según el alto tribunal, Jennifer Arias logró el título de Magíster en Gobierno y Políticas Públicas sin cumplir con los procedimientos de sustentación del trabajo de investigación que debía realizar, como requisito para lograr el título académico.

¿Hubo plagio?

En octubre de 2021, los medios de comunicación revelaron los detalles de la trampa, ya probada, que realizó la excongresista en su tesis. El texto presentado por Arias tenía similitudes casi calcadas con un texto del abogado constitucionalista peruano Christian Guzmán Napurí, y la copia de otros textos de los que nunca hizo referencia de su verdadera autoría.

La decisión

En concreto, el Consejo de Estado evidenció que los jurados que debían aprobar la tesis nunca acreditaron que lo hubieran hecho, pese a que sus firmas quedaron en el formato oficial de la universidad. Y, además, que la propia Universidad reconoció que en sus archivos no existe la designación de los jurados que debían calificar la tesis de Jennifer Arias.

¡Se imaginan que le suspendan a uno el título de la maestría!

Esto le pasó a La expresidenta de la Cámara de Representantes, Jennifer Arias, ya que el Consejo de Estado suspendió provisionalmente el título de maestría en medio del proceso que inició la misma universidad del Externado al comprobar que su tesis fue plagiada.

El título que se le suspende es el de Magíster en Gobierno y Políticas Públicas. Y es que recordemos que en octubre de 2021, los medios de comunicación revelaron los detalles de la trampa, que realizó la excongresista en su tesis.

¿Cómo se dieron cuenta? Pues trabajo de grado tenía similitudes casi calcadas con un texto del abogado constitucionalista peruano Christian Guzmán y la copia de otros textos de los que nunca hizo referencia de su verdadera autoría.

En concreto, el Consejo de Estado evidenció que los jurados que debían aprobar la tesis nunca acreditaron que lo hubieran hecho, pese a que sus firmas quedaron en el formato oficial de la universidad. Y, además, que la propia Universidad reconoció que en sus archivos no existe la designación de los jurados que debían calificar la tesis de Jennifer Arias.