El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se dirigirá al pueblo trabajador colombiano desde el balcón de la Casa de Nariño el próximo 1 de mayo, en conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores. Petro repetirá el formato que utilizó anteriormente cuando era alcalde de Bogotá y convocó una marcha de apoyo a las reformas de su gobierno en la que habló directamente al pueblo desde el balcón presidencial. En esta ocasión, se espera que Petro defienda la ambiciosa reforma laboral que su gobierno ha presentado en el Congreso.

La reforma laboral propuesta por el gobierno de Petro defiende los contratos a término indefinido como la forma favorecida de contratación y recupera la jornada nocturna de 12 horas. También incluye jornadas flexibles para equilibrar la vida personal y laboral y protege el derecho colectivo al trabajo y los movimientos sindicales.

Esta será la primera gran aparición pública de Petro después de realizar un “revolcón” ministerial en el que sacó a varios de sus grandes ministros, incluyendo el de Interior y el de Salud, quienes eran responsables de conseguir mayorías parlamentarias para estos proyectos.

Pese a esto, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, fue mantenida por Petro y se espera que sea una de las personas de confianza del presidente, pues es a quien deja de presidenta encargada cuando sale del país. El cisma ministerial ha provocado la salida de muchos ministros moderados y un giro de Petro hacia ministros más de izquierda que son viejos conocidos, pues formaron parte de su administración cuando fue alcalde de Bogotá.

Con la tradicional marcha de reivindicaciones laborales convocada por sindicatos y centrales de trabajadores, se espera que el discurso de Petro tenga un gran impacto en la opinión pública y pueda influir en la tramitación de la reforma laboral en el Congreso.