La Casa de Nariño se convertirá en la primera residencia presidencial en Latinoamérica en obtener una certificación de carbono neutro, según anunció el director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Mauricio Lizcano.

Este proyecto forma parte de los componentes ambientales y de bienestar del Plan Nacional de Desarrollo y se llevarán a cabo 40 proyectos en los próximos dos años para lograr la meta del Gobierno de hacer de la Casa de Nariño un ejemplo de sostenibilidad y transición energética justa.

Entre los proyectos a implementar se encuentran el uso eficiente y ahorro de agua y energía, compras verdes, movilidad sostenible, conservación patrimonial, y la reducción, reutilización y aprovechamiento de residuos. La Presidencia también busca obtener certificaciones LEED O+M y de responsabilidad social.

La estrategia permitirá la operación y evolución sostenible del Palacio de Nariño, involucrando a cada miembro de la comunidad de la entidad y ratificando el compromiso con las comunidades vecinas, la ciudad, el país y el mundo.

“Algunas de las metas de este plan son: reducir el consumo de agua en un 20%, las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50% y la generación de residuos ordinarios en un 20%”, aseguró Lizcano. El programa de sostenibilidad también incluye mejoras en la calidad del aire, alimentación saludable y salud mental, así como la conservación y reforzamiento de las estructuras de la Casa de Nariño, la instalación de paneles solares y la gestión de la demanda energética.