Después de analizar la reforma a la salud del Gobierno Petro y las propuestas de los partidos políticos, Fedesarrollo concluyó que “no se necesita” una reforma a la salud en este momento “porque todas las leyes están y hay es que reglamentarlas”, dijo Jairo Núñez, investigador de Fedesarrollo.

En este sentido, tras hacer un diagnóstico detallado del sistema de salud desde 1993 elaboró una serie de propuestas para mejorar el sistema actual.

Las propuestas presentadas por Fedesarrollo se centran en 10 ejes fundamentales que incluyen la estructuración de redes integrales e integradas a nivel regional, el fortalecimiento de la red hospitalaria, la política de talento humano en salud, la sostenibilidad financiera, la contratación EPS-IPS, el fortalecimiento de la SNS, la instauración de instancias de coordinación, la salud pública y el sistema de información público, interoperable y transaccional.

En el informe, se destaca que la cobertura y prevención en el sistema de salud han ido en aumento en las últimas tres décadas. Según la encuesta de Calidad de Vida del Dane, la cobertura a nivel nacional pasó del 24% al 94%, con una notable expansión entre 1993-1997 y 2003-2008. Además, la brecha entre zonas urbanas y rurales prácticamente se cerró y la brecha de cobertura según ingresos también se ha reducido significativamente.

Las propuestas de Fedesarrollo incluyen la implementación de tres categorías para la implementación de políticas y estrategias en centros urbanos, ciudades y municipios, y municipios pequeños y rurales, con énfasis en servicios especializados. También se propone la reducción gradual del 60% a la red pública, la revisión sobre la integración fiscal en los límites del 30% en las zonas más remotas, la unificación del régimen contributivo con el subsidiado y la garantía de igualdad de condiciones en el mercado de las IPS.

En cuanto a la atención primaria, se propone aumentar los recursos mediante el aumento de la UPC o subsidios por oferta, y establecer un mecanismo de manual tarifario que considere las estructuras de costos y calidad de servicios de los prestadores. Por último, se detalla la posibilidad de ajustar los recursos de fuentes como el SGP y las UPC para aumentar la atención primaria en el sistema de salud.