El paro minero que se lleva a cabo en el Bajo Cauca antioqueño ha generado graves consecuencias humanitarias en el sur de Córdoba, donde aproximadamente 250.000 personas se encuentran confinadas debido a la imposibilidad de movilizarse hacia el sur del país.

Los municipios de La Apartada, Puerto Libertador, San José de Uré y Montelíbano son los más afectados por el bloqueo y las manifestaciones de los mineros, lo que ha generado desabastecimiento de medicamentos y alimentos, represamiento de carga hacia la Costa Atlántica y reducción en los despachos de buses.

El gremio de transportadores estima que las pérdidas económicas a causa del paro minero ascienden a 15.000 millones de pesos. Además, la situación se ha agravado debido a la posible presión ejercida por grupos armados ilegales como el Clan del Golfo.

Ante esta situación, el gobierno de Córdoba logró un acuerdo inicial con los mineros para permitir un corredor humanitario de dos horas diarias para el paso de ambulancias y personas que necesiten transitar por la zona. Sin embargo, la situación sigue siendo crítica y se espera que se encuentre una solución pronta y efectiva para evitar mayores consecuencias humanitarias y económicas.